jueves, 22 de abril de 2021

Barrabás y su Rol en el Cristianismo

 


“Encomendados sean a Satanás y Barrabás tales libros”, Miguel de Cervantes.

Lo que sabemos de Barrabás proviene de los evangelios canónicos de Marcos, Mateo, Lucas y Juan. Estas menciones no son, precisamente, halagadoras. Entre los cuatro se le caracteriza como salteador, sedicioso, asesino y famoso, por supuesto. Pero, a pesar de su fama, no se le menta en alguna otra fuente histórica.

Para los que no están empapados en los temas cristianos les voy a resumir la historia contada en la Biblia:

  1. Jesús es acusado de sedición por las autoridades judías y llevado ante el gobernador romano Poncio Pilatos para ser juzgado.
  2. Pilatos no ve que el delito de Jesús sea digno de muerte, pero los líderes judíos insisten.
  3. Pilatos echa mano de una tradición y da a escoger a la multitud sobre que preso liberar: Jesús o Barrabás.
  4. La multitud, incitada por los líderes judíos, escogen liberar a Barrabás.
  5. Jesús es condenado a muerte.
  6. Pilado se lava manos.



No quiero desviarme del tema, pero sospecho que esta historia fue diseñada por la facción cristiana romana con el fin de eludir la culpa de Roma en la muerte de Jesús y responsabilizar a los judíos. De esta forma justificaron su liderazgo sobre la facción cristiana judía. En una época donde los romanos y los judíos se disputaban el liderazgo dentro del cristianismo, esta historia no sólo exime a los romanos del asesinato de Jesús, también responsabiliza a los judíos. Así inicia el odio a los judíos en Europa, pero eso es otro tema. (Prometo hablar de esto luego).

Volvamos a Barrabás.

Barrabás, a pesar de ocupar poco espacio en los evangelios y no contar con registro documental que lo vuelva histórico, incide en el desarrollo teológico del cristianismo desde la antigüedad. Por lo menos, su personaje cuenta con cinco posibles interpretaciones:

1. Antiimperialista

Según esta interpretación, Barrabás representa más que un pillo afanado por sacar provecho, mediante la delincuencia, de su convulsa sociedad. Ejemplifica el espíritu pensante, crítico, contestatario, militante, revolucionario y opuesto, heroicamente, a un régimen extranjero, depravado, opresor y saqueador. Mediante manifestaciones violentas, sicariato planificado, manipulación religiosa y otras ramas del crimen organizado, Barrabás busca desestabilizar el orden social, económico y político para incitar al pueblo y convencerlo de revelarse contra del poder ostentado por el Imperio Romano en la región de Palestina. Representa a una minoría pensante, inconforme con el statu quo y convencida de la naturaleza mesiánica de sus actos para liberar a su nación.

Al no pertenecer al bando ganador, queda relegado, por la narrativa, a un personaje mentecato, visceral y motivado por un instinto casi animal. De esta manera, cae al nivel más bajo del urbanismo como un inadaptado y es desechado por la sociedad que lo engendró.

2. Alegórica

El personaje es una alegoría de la humanidad. Barrabás es un reo que será crucificado para castigar sus delitos contra el Imperio Romano. De la misma forma, la humanidad está condenada a la muerte eterna por haber pecado y ofendido a Dios. Barrabás es rescatado por Jesús, quién siendo inocente, se ofrece voluntariamente a recibir el castigo en su lugar, De igual forma, Jesús muere para expiar de toda culpa a la humanidad, trayendo el don de la salvación.

3. Proselitista

El relato es un mensaje para sus contemporáneos. Los nuevos cristianos y los judíos se debatían sobre la naturaleza del Mesías; los primeros, abogaban por un salvador del espíritu, con un reino celestial y con la paz como medio de convencimiento y los segundos, por un libertador de las cadenas romanas, con un reino terrenal y con la guerra como mecanismo de triunfo. Después de leer el pasaje, donde el pueblo escoge cuál de los dos reos será exonerado de su castigo, el lector también debe escoger entre un Barrabás belicoso, impetuoso y bravío que al fin de todo fue derrotado y contrariamente, un Jesús pacífico, espiritual y victorioso que resulta glorificado al resucitar. ¿Cuál escogería usted?

4. Antisemita

Para lograr mayor aceptación dentro del Imperio, durante los primeros siglos del cristianismo, se debía exonerar a los romanos de toda responsabilidad sobre la muerte de Jesús. Poncio Pilatos, representante de Roma y portador de sus virtudes, es justo, elocuente, sabio, sabe escuchar el clamor del pueblo y respeta sus tradiciones. Por este motivo, no encuentra delito en Jesús, pero como representante digno, renuncia a su posición personal y asume la voluntad popular, condenando a Jesús y perdonando la vida a Barrabás, no sin antes lavarse las manos, para limpiar al Imperio de cualquier culpa. Igual que Judas, Caifás y Barrabás, el pueblo judío, junto con sus rituales y tradiciones, participa directamente en la condena y muerte de Jesús dando origen al antisemitismo. Siendo Jesús Judío, es la tradición teológica judía un duro obstáculo para el desarrollo hegemónico del cristianismo por el mediterráneo. Desvirtuar a los contrincantes es un recurso milenario de la política.

 


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